El Parque Nacional de los Tsingys de Bemaraha está situado en la región de Melaky, al oeste de Madagascar. Tiene una superficie total de más de 150.000 ha. y está considerado Patrimonio de la Humanidad desde 1990. En 1997 se convirtió en Parque Nacional y al mismo tiempo se protegió la zona norte como Reserva Natural Integral Estricta.
Los Tsingys de Bemaraha son los más grandes de la isla roja, por delante de la reserva de Ankarana, ubicada más al norte.
– En canoa. El descenso del río Manambolo durante 3 o 4 días en una barca puede sonar idílico. Y probablemente lo sea según lo aventureros que seáis. Pero para ello, primero hay que llegar hasta Akavandra, que es de donde parten las excursiones. La «pequeña» pega es que sólo se puede llegar en avión. Si os lanzáis, viviréis sin duda una gran aventura. Sed precavidos con vuestros objetos personales más valiosos y armaos con crema solar, repelente de mosquitos, gorro y gafas de sol. El descenso culmina en Bekopaka, entrada sur de los Tsingys.
En resumen, si os gustan los animales y sois aventureros, bienvenidos. Si no os gusta tener «compañía» en la habitación, este alojamiento no es vuestro lugar, o por lo menos, no las habitaciones Moyen Budget.
Tip: Tanto para visitar los grandes como los pequeños tsingys, así como la garganta del Manambolo, es obligatorio ir acompañado de un guía. Se puede contratar allí mismo en la entrada del parque.
Tip: También hay que tener en cuenta durante la visita que se deben respetar los fady (tabús) locales. En mi artículo «Madagascar, ¿que es fady?» encontraréis información completa sobre ello.
Llegamos al Manambolo, volvimos a cruzarlo en barca, y en la otra orilla nos reencontramos con el conductor y el coche que habíamos desaprovechado por nuestra mala fortuna.