«Al fín encontré mi camino, le digo adios al ayer, 

piso el acelerador, no hay frenos en esta carretera perdida». 

Bon Jovi, Lost Highway.  

La Ruta 66, (U.S. 66), es también conocida como la carretera principal de América, la carretera madre o la carretera de Will Rogers.

Nació formando parte de la de la red original de carreteras federales de los Estados Unidos, allá por 1926. En un principio sus 3.939 kilómetros recorrían Chicago, Missouri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo México, Arizona y California.

A lo largo de los años, la Ruta 66 fue sufriendo desperfectos y mejoras que a día de hoy claramente han dado como resultado una mutación bastante considerable en su trayecto. Una de las repercusiones más sonadas fue el cambio de Los Ángeles por Santa Mónica como destino final. 

A día de hoy la Ruta 66 sigue conservando su halo de leyenda, pero en realidad hace tiempo que no se considera oficialmente parte de la Red de Carreteras de EEUU.

En concreto, el 27 de junio de 1985 se descatalogó como tal. Su importancia quedó relegada por la implantación de la Red de Autopistas Interestatales. Esto ha venido pasando en todos los países en progreso, solo que este caso es especial. Se trata de una leyenda todavía viva que muchos se resisten a olvidar. Es por esto que en algunos tramos sigue constando pero esta vez como Ruta Histórica 66 (Historic Route).

Algunos tramos de la ruta histórica todavía se pueden recorrer de manera ininterrumpida sin contar con otras vías adyacentes. Los tramos más largos que todavía perduran en el tiempo son: 

• Illinois: South Joliet Road – Bloomington – Williamsville: 253 km
• Misuri, Kansas & Oklahoma: Clementine MI – Tulsa OK – Oklahoma City: 565 km
• Oklahoma & Texas: Oklahoma City – Alanreed TX: 241 km
• Nuevo México: Albuquerque – Los Lunas – Continental Divide: 219 km
• Arizona: Seligman – Peach Springs – Oatman –Topock: 228 km
• California: Goffs Road – Amboy – Victorville: 307 km

Algunos estados han contribuido a perpetuar  partes de la ruta como carreteras estatales. Ejemplos como la 366 o la 266 de Missouri, deben su denominación a la mítica ruta original.

La carretera estatal 66 de Oklahoma es una buena opción para los que se niegan a realizar por autopista los tramos que se puedan hacer por carretera.

La ruta estatal 66 que une Seligman con Kingman (Arizona) es también un tramo mítico. Pueblos como Kingman tratan de mantener vivo el «Espíritu 66» en cada rincón; señales de tráfico, tiendas de recuerdos y todo tipo de pequeños homenajes hacen de este pueblo uno de los principales puntos de la ruta.

Como Kingman, todavía a día de hoy muchos pueblos, emplazamientos y negocios viven de la leyenda de la ruta 66 y esto ha contribuido en gran parte a que este mito siga vivo contra todo impedimento.

Si recorréis esta famosa ruta, yo os recomendaría hacerla de Este a Oeste. De esta manera, cuando se va perdiendo el entusiasmo inicial y el cansancio comienza a hacer mella tendréis motivación extra. La motivación de visitar algunos de los más famosos parques nacionales de Estados Unidos.

Hay que intentar no ser muy purista y en ocasiones salirse de la Ruta 66, ya que lugares como el Grand Canyon bien  lo merecen.

Otra motivación extra de terminar en la costa oeste es la famosa playa de Santa Mónica. Situada junto a la ciudad de Los Ángeles, se hizo mundialmente famosa gracias a la serie Baywatch, Los Vigilantes de la Playa. Si habéis elegido el verano para hacer la Ruta 66, el chapuzón final en Santa Mónica o Venice Beach es un must.

 Aquí os dejo un enlace con los lugares más interesantes para visitar en la Ruta 66 estado por estado. 

¡Disfrutadlos!