Bryce Canyon es un lugar simplemente alucinante. Si visitáis el oeste de Estados Unidos, este es en mi opinión uno de los parques que no deberíais perderos por nada del mundo. Realmente si me dieran a elegir entre el Grand Canyon o el Bryce, tendría que pensármelo mucho antes de contestar y la verdad es que no se con cual me quedaría.
Sus formaciones son tan increíbles que parece que estemos dentro de un decorado fantástico. El decorado de una película de hadas y duendes.
El Bryce Canyon en realidad no es exactamente un cañón. No ha sido formado tan solo por el desgaste del agua de un río. Fenómenos climatológicos como el viento y el hielo han colaborado también en la escultura de sus siluetas. Las enormes chimeneas rocosas o hoodos son tan impresionantes que os dejarán sin palabras.
Como llegar
La mayoría de los viajeros vienen al Bryce procedentes del Zion National Park e incluso del Grand Canyon. Aquí os dejo los enlaces para que visualicéis fácilmente como llegar desde los principales parques de los alrededores.
Viniendo del Parque Nacional Zion
Llegando desde el Grand Canyon (South Rim)
Conduciendo desde Capitol Reef
Desde Salt Lake City, capital de Utah.
Si preferís llegar en avión, el aeropuerto más cercano es el de Cedar City, al oeste del Bryce. Aquí os dejo cómo llegar desde él hasta el Bryce.
Hay otro aeropuerto que se encuentra a tan solo cinco kilómetros, pero se dedica a los vuelos panorámicos.
La entrada
Al igual que en el resto de parques nacionales, tenéis la opción de:
- Adquirir el Annual Pass que os permite la entrada a todos los Parques Nacionales de Estados Unidos durante un año.
- Pagar la entrada simple cuyo precio es de 30$ por vehículo y que es válida para entrar 7 días al parque.
Alojamiento
Tal y como suele suceder en los alrededores de los parques nacionales de Estados Unidos, no fue fácil encontrar un alojamiento con un precio razonable para nuestro presupuesto. Finalmente nos decantamos por el Foster’s Motel. Nos resultó bastante bien porque tienen la opción de habitaciones con dos camas dobles. De esta manera, entre cuatro personas, compensaba bastante.
Situado a unos pocos minutos en coche de la entrada norte del Bryce, la ubicación no podía ser mejor. Las habitaciones son las típicas de los moteles estadounidenses, impersonales y enmoquetadas pero prácticas. Tienen un Steak House donde podréis degustar la típica gastronomía estadounidense, a saber, costillas, alitas, hamburguesas…
Si elegís la opción de acampar, podéis hacerlo en el North Campground o en el Sunset Campground. En ambos el precio es de 20$ por tienda y 30 por auto-caravana. También existe la posibilidad de la acampada libre en el backcountry. Para esto último se necesita obtener permiso en el Centro de Visitantes.
También por si os apetece os dejo aquí algo de información por si preferís alojaros en un tipi.
El Visitor Centre
Lo primero que hay que hacer es pasarse por el Centro de Visitantes. Allí os proveerán del mapa con la ruta en coche y los trails. También os recomiendo que preguntéis por las charlas y actividades con los rangers.
Hay una tienda de recuerdos y una librería con muchísima información.
También proyectan una película de 20 minutos de duración para que os podáis hacer una idea del parque antes de comenzar vuestra visita.
El horario de apertura es de marzo a septiembre de 8 a.m a 8 p.m y de 8 a.m a 4,30 p.m de noviembre a marzo. En octubre y abril, de 8 a.m a 6 p.m.
Eco-tip: Si vais con niños informaos sobre el programa «jóvenes guardabosques». Es muy divertido y educativo.
La visita en coche
Si no disponéis nada más que de un día para pasar en este maravilloso parque, os recomiendo que hagáis el recorrido en coche. A esto le podéis añadir algún pequeño trail, como hicimos nosotros.
Lo mejor es conducir hasta llegar al Rainbow Point, que son 29 kilómetros. Desde allí vais regresando haciendo parada en los 13 puntos panorámicos señalizados que encontraréis de camino. Todos ellos ofrecen una visión totalmente novedosa y diferente del Bryce y ninguna os dejará indiferente.
Si calculáis bien la hora, al final del día podréis disfrutar de la puesta de sol en Sunset Point.
Eco-tip: Una buena opción para trasladarse dentro del parque es el Shuttle. Se deja el coche aparcado en el Centro de Visitantes y se toma este autobús que va parando en los miradores más populares. Así no contaminamos y evitamos la formación de atascos. En verano la búsqueda de aparcamiento os puede hacer perder mucho tiempo. Los autobuses pasan con frecuencia de 10 a 15 minutos y son gratuitos.
Los trails
Existen trails de diferente duración y dificultad, muchos de ellos accesibles desde los propios puntos panorámicos de la carretera. Si sólo vais a pasar un día en este fantástico lugar, haced como nosotros y limitaos a uno o dos trails de corta duración. Si vuestra finalidad es quedaros más días y hacer varias caminatas, no olvidéis informaros en el Centro de Visitantes sobre los permisos que hay que obtener para los trails por el backcountry.
– Nuestra elección fue el Queen’s Garden Trail. Parte de Sunrise Point, y es el menos complicado de todos los trails que penetran dentro del cañón. Se descienden unos 98 metros que serpentean entre variadas formaciones, especialmente chimeneas o hoodos. En total son 3 kilómetros, ya que para regresar se enlaza con el Navajo Trail. Está perfectamente señalizado.
– El Rim Trail es otro de los más populares del parque. Son más de 9 kilómetros (solo ida) que unen Fairyland con Bryce Point. Después se regresa por el mismo camino. Es por esto que la mayoría de la gente lo recorre parcialmente y vuelve. Nosotros salimos desde Fairyland y recorrimos el tramo que quisimos, hicimos unas fotos y vuelta. Continuamos con nuestra ruta por carretera y al llegar al Bryce Point hicimos exactamente lo mismo. Como este trail recorre el parque desde su parte alta, se obtienen unas vistas fantásticas.
Eco-tip: Llenad vuestras botellas y cantimploras en la fuente de agua potable del Visitor Centre antes de comenzar vuestro recorrido. Otros lugares con agua potable son el Bryce Canyon Lodge, la tienda, el High Plateaus Institute y el Sunset Point.
Eco-tip: Mientras recorremos los trails, es bastante probable que encontremos animales. Como siempre recomendamos en este blog, no hay que alimentarlos. Aunque parezca obvio siempre se ve gente que todavía lo hace. Aquí no sólo no es recomendable, sino que está penado por ley federal. Como pasa muchas veces, hay quien no hace caso hasta que no le tocan el bolsillo. Si quieres tener más información de porqué no hay que alimentar a los animales, te recomiendo que visites mi post «Alimentando animales salvajes a la carta».
Otras actividades
Bryce Canyon es un parque que ofrece experiencias al aire libre de lo más variadas. Se organiza desde senderismo a la luz de la luna y noches astronómicas hasta caminatas con raquetas de nieve en invierno. Os informarán en el Visitor Centre.
* Bicicleta: El área que rodea el Bryce Canyon es un lugar bastante escarpado, por lo que los caminos específicos para bicicleta de montaña se reducen a….uno. El Thunder Mountain Bike Track tiene casi 14 kilómetros y serpentea entre las rocas rojizas. Si estáis interesados podéis echar un vistazo a esta página que también incluye un vídeo.
* Rafting: La empresa que controla el tema del rafting por esta zona es Always Rafting. Se ubica al norte del Bryce, en el panorámico valle de Marysvale. El precio es de unos 40$ por un rafting de 2 horas.
* Vuelos panorámicos: Desde el pequeño aeropuerto de Bryce, 5 kilómetros al norte del Bryce Canyon. Aquí tenéis información de las diferentes compañías que los realizan.
* Montar a caballo: En Canyon Trail Rides ofrecen tours de entre 2 y 3 horas con precios que oscilan entre los 65 y los 90$.
Os recomiendo absolutamente visitar este maravilloso parque nacional que sin duda os dejará con la boca abierta.
Tip: Si os gustan las aventuras y vais a pasar más días por la zona, podéis plantearos la opción de visitar The Wave, ubicado a 2,30 h del Bryce.